v Radio
La historia de la radiodifusión se encuentra íntimamente ligada con el origen y desarrollo de las telecomunicaciones. Los orígenes más remotos de la radio, se encuentran en la telegrafía sin hilos, por medio de las ondas, en donde intervienen fenómenos físicos muy complejos y técnicas muy elaboradas. En diversos países principalmente europeos y en Estados Unidos se realizaron investigaciones alrededor de las comunicaciones a distancia. Entre las investigaciones que se destacan se encuentran las del alemán Heinrich Hertz quien realiza en 1887, los primeros experimentos que probaban las teorías de Maxwell, mediante la producción de ondas hertzianas. En 1890 el francés Eduardo Branly, perfecciono un aparato detector de ondas hertzianas, que consistía en un tubo de limaduras, unido a una pila, a este aparato se le conoció con el nombre de cohesor o radio conductor. Fue en 1896 en gran Bretaña Guillermo Marconi, logro su primera patente y logro un intercambio de señales Morse por telegrafía sin hilos a una distancia de 3 kilómetros. En México la radiodifusión surge en 1921, y su inicio es eminentemente comercial, auspiciada entre otros por las familias Milmo y Azcárraga es de comprenderse que al principio es una radio experimental, pero ya en 1923, tiene una franca connotación comercial, siendo las primeras estaciones las siguientes CYL, CYB.
En 1930 la familia Azcárraga funda la XEW que ha tenido una presencia altamente significativa en la radiodifusión mexicana, siguen las transmisiones radiales a un ritmo vertiginoso en 1985, según los datos de la Cámara Nacional de la industria de la Radio y Televisión, funcionaban en México 856 emisoras radiales de las cuales 818 eran comerciales y 38 a las llamadas radiodifusoras culturales. Gran parte de la programación de las emisoras de radiodifusión se dedica a la transmisión de los diferentes géneros musicales, por lo que existe una relación con las compañías disqueras.
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